NOTA EL TIEMPO PASA

El tiempo pasa
El tiempo pasa, transcurre sin detenerse y en ese tiempo transcurrido lo mejor que le puede pasar a un político es aprender de sus propios y ajenos errores.
La Asamblea de Mayores Contribuyentes acontecida en nuestra ciudad el jueves 26 de noviembre, nos demuestra que muchos no hay aprendido absolutamente nada.
El solo hecho de tener una mayoría legislativa no nos da siempre la razón, como tampoco lo da, ser una minoría.
La razón la da el consenso.
La Ordenanza Preparatoria de la Fiscal e Impositiva aprobada por mayoría ese día, fue solo el reflejo exacto de cómo se gobierna desde este Ejecutivo Municipal, es decir con la soberbia propia de quien ostenta el poder y no sabe como manejarlo. Hasta, tal vez, violando la ley orgánica de las municipalidades, en sus articulos 101, 102 y 103. Que lejos están las promesas de campaña realizadas por nuestro Intendente Fisher, cuando decía de que este gobierno se iba a caracterizar por tener las puertas abiertas (eufemismo de tener contacto permanente con todos los sectores de la sociedad y trabajo codo a codo con los legisladores opositores).
Se presentó una ordenanza preparatoria fiscal e impositiva, que nada tiene que ver con la situación económica de nuestra sociedad, envuelta en “papel celofán” a la que solo le faltaba poner el moño de su aprobación. No hubo ningún tipo de posibilidad, por parte de la oposición, de hacer los cambios que desde su punto de vista eran necesarios y que a partir de ellos se lograría el tan ansiado acuerdo.
Pueden tener parte de culpa los Concejales del Oficialismo reinante por su obsecuencia hacia el Ejecutivo, pero el mal inicio de la cuestión fue la desprolija presentación de la Administración Municipal, adaptando una ordenanza vigente en la ciudad capital de la Provincia, que nada tiene que ver con la realidad de nuestra Laprida y que no habia sido ni presentada, ni discutida con otros actores de nuestra sociedad, que hubiesen aportado su conocimiento, su idea, su impronta en pos del mejoramiento de la misma.
Su principio se viola por ejemplo el concepto de Tasa (pago por una contraprestación), ya que esta ordenanza lo convierte en impuesto. Ej: Limpiar el cordón de una casa valuada en 50000 pesos de12 metros de frente, nos insume el mismo tiempo y desgaste de materiales que hacerlo por una valuada en 100.000 de 12 metros de frente, sin embargo las tasas a pagar son distintas y así otros ejemplos.
Es muy probable que con la nueva composición del Concejo Deliberante local, obligue al Poder Ejecutivo Municipal y su bloque, a buscar las líneas de acuerdos programáticos (no co-gobierno) tan necesarias para el crecimiento de nuestro pueblo, fomentar el dialogo, gobernando para toda la sociedad y no solo una parte.
Nada es sencillo
Las relaciones anteriores cuando la oposición era el Frenta para la Victoria, siendo estos mayoria en el Concejo Deliberante, trabajaron ardientemente por fomentar el desgaste del gobierno radical, encabezado por la Dra. Susana Iglesias, haciéndole un mal de mucha importancia a su administración y a todo el pueblo de Laprida en su conjunto. No queremos entrar en detalles acerca de todo lo que aconteció en esa etapa, pero cualquiera que tenga un poco de memoria recordara por ejemplo la interpelación que sufrió la Dra. Iglesias a pocos dias de cambiar la composición del Concejo, la no aprobación de partidas para cuestiones de salud o alimentación, la no aprobación de compensación de partidas, etc. etc. etc. Pero, si bien la memoria recuerda estos desagradables hechos, no por eso debemos tropezar con la misma piedra.
Otra cuestión
La Edil Pérez en su alocución del jueves pasado, manifestó como discurso que viene bajando desde la cima del poder político oficial, adaptandolo al local, que el radicalismo quería desestabilizar la administración Fisher.
Quizás, en su lógica política esa posibilidad pudiera entrar, ya que su partido estuvo involucrado directamente en las crisis del año 1989 y 2001, fomentando la desestabilización social nacional, creyendo en su necedad, que hay enemigos en todas partes, cuando en realidad solo hay adversarios.
Pero nada mas lejos de la realidad. La ciudadanía, de la que son parte los partidarios del radicalismo, quieren con absoluta convicción que a este gobierno le vaya bien, que este gobierno termine su mandato como la ley manda.
Solo la palabra del pueblo, a través del voto, es el que decide.